sábado, 27 de agosto de 2011

EMPRESARIOS NO PAGARAN SOBREGANANCIAS


Para empezar, como dicen, todo depende del cristal con que se mire: ALgunos ven este anuncio como un gran logro, superando el viejo obolo minero de 500 millones de soles al año, de los cuales se ha ejecutado un nivel menor al de la ejecucion publica (tan criticada por los empresarios privados!!), y otros lo ven como la nota de abajo, casi lo mismo de antes y un incumplimiento del gobierno.

Como fuere, nos guste o no, cambiar las cosas en lo economico ya se ha demostrado, una vez mas, no es nada facil, y eso se veia venir si recordamos con quienes se reunio HUmala en su campaña, incluida en su visita a EE.UU., y lo que decia sobre promover las inversiones y el crecimiento economico para lograr la inclusion social en base a una mejor redistribucion. Asi, pues, advertidos estabamos!!

Mas bien, tambien es bueno considerar que tambien algo dijo Lerner sobre prevencion de conflictos sociales:
http://elcomercio.pe/politica/1179619/noticia-lerner-anuncio-estrategia-gobierno-prevenir-conflictos-sociales esperemos avances concretos al respecto!!

viernes, 10 de junio de 2011

COMENTARIO DE SENECIO LOPEZ


SENECIO LOPEZ
Derrotar al fujimorismo no era difícil, pero vencer a todos los poderes que lo respaldaban parecía imposible. Era una batalla desigual. Pocos analistas pensaban que Ollanta Humala pudiera imponerse a Fujimori, a los grandes grupos empresariales, a la mayoría de los medios, al cardenal Cipriani y a García. A mí me parecía difícil, pero no imposible. ¿Por qué era difícil? El poder económico y el poder político no estaban dispuestos a perder el poder político. Temían que, perdiéndolo, su poder económico y mediático corría un serio peligro. García creía que la continuidad del modelo neoliberal peligraba y que Ollanta, una vez en el gobierno, levantara la alfombra de Palacio. ¿Cuál era el miedo del cardenal Cipriani? No temía, por cierto, perder el cielo sino il bocatto di cardinale (algunos apetecidos bienes terrenales por los cuales litiga).

Era difícil, además, porque, detrás de la candidatura de Ollanta, no existían ni existen partidos organizados que pudieran contrarrestar la ofensiva feroz de todos los poderes. ¿Por qué no era imposible? Había antecedentes de la derrota de los medios.

Barrantes en los 80 y Belmont en 1989 habían logrado victorias parciales y Fujimori en 1990 logró una victoria total cuando ganó el gobierno contra la voluntad de los medios. ¿Por qué triunfó Ollanta? Hay varios factores que han contribuido a su victoria. En primer lugar, la calidad del candidato. Ollanta tiene defectos, sin duda, pero son mayores sus virtudes. La primera es una voluntad férrea, forjada en otras batallas muy difíciles (lucha contra el terrorismo, guerra del Cenepa) que debió librar como militar. La segunda, una persistente y legítima ambición de poder que lo impulsó a luchar denodadamente por la conquista del gobierno.

La tercera, la madurez del candidato, adquirida a lo largo de la lucha política desde el 2006 en adelante. En una reunión de un centenar de invitados sostuvo: que me disculpe mi profesor de política, pero yo aprendí mucho más en la calle (en contacto directo con el pueblo) que en la Católica. Esa madurez le permitió en estas elecciones adecuarse a los cambios de los tiempos y las circunstancias sin renunciar a los objetivos programáticos y estratégicos. La segunda razón de su triunfo es la campaña electoral impecable que desplegó con la asesoría de especialistas de primer nivel. Gracias a sus asesores pudo salir airoso de los desafíos más difíciles de la campaña.

En tercer lugar, la conformación de una coalición de centroizquierda le permitió enfrentar con éxito la segunda vuelta electoral. El 32% de esa coalición provenía de las corrientes nacionalista e izquierdistas de la primera vuelta y el 20% provino de la vertiente liberal-democrática encabezada por Alejandro Toledo y Mario Vargas Llosa. Por ser liberal, democrática y ética, esta corriente era profundamente antifujimorista. Hay que destacar la valentía y la entereza moral de los Vargas Llosa (Mario y Álvaro) para defender sus principios aun a costa de enemistarse y ganarse los odios del poder económico, mediático y religioso. En cuarto lugar, el apoyo de algunos medios masivos (La República y La Primera) y de algunas organizaciones de la sociedad civil que le dieron sustento e impulso a la campaña, especialmente en la última semana en la que se rompió el virtual empate de los candidatos.

¿Cuáles son los principales desafíos de Ollanta como presidente? El primero, mantener el impulso del crecimiento económico. En segundo lugar, elevar la presión tributaria sin abusar de los impuestos. El tercero, desplegar el conjunto de políticas sociales como derechos sociales universales que prometió en la campaña. El cuarto, aplicar un shock en los aparatos sociales del Estado (educación, salud, justicia y seguridad) para hacerlos más ágiles, eficientes y transparentes. Todo eso requiere, sin duda, manejar las políticas económicas con y desde el centro y las políticas sociales con y desde la izquierda. Que Dios nos ayude.

domingo, 20 de marzo de 2011

SAN JOSE

San José

“En los cuadros de la Sagrada Familia, a José lo suelen presentar los pintores en un discreto segundo plano, incluso un poco más borroso y oscuro, viejecito y venerable, como si tuviera poco que ver en la escena. Antes me disgustaba este ninguneo, pero ha acabado por parecerme muy bien, muy significativo y estupendo como modelo de la Iglesia

A José le pega menos que a nadie el lujo, la ostentación. Lo suyo no es el oro sino la madera, no es un sacerdote intermediario en los oficios divinos sino un discreto e imprescindible artesano, no va vestido con ropajes celestes, su color no es el rojo, el azul y mucho menos el dorado; generalmente se le ve con una túnica lisa, marrón casi siempre.

José tiende al gris, al segundo plano, al silencio. Y me llena de alegría comprobar que uno de nuestros santos venerados ha salido inmune del bombardeo de nuestras petulancias, de los oros y coronas, de los sacerdocios y los sacrificios, de todas las ingeniosas maneras de estropear a Jesús y al Abba con que nosotros, la Iglesia, hemos deteriorado el mensaje de Jesús a lo largo de nuestra historia.

A modo de pedantería final, me llama la atención que entre los numerosos nombres de los papas, Pablo, Juan, Benedicto, león, Gregorio, etc., falte el de José.

Ningún papa se ha fijado, al parecer, en que es el que mejor le conviene, el que sirve en silencio, el que no es protagonista, el que vela por lo importante sin serlo.

Emocionante José, del que no sabemos casi nada, ni cómo se llamaban sus padres, ni siquiera cuándo murió. Sólo que fue el ángel de la guarda de Jesús y María, y que a Jesús le conoció todo el mundo como ”.

Editorial de revista El mensajero (España), marzo del 2009.

sábado, 19 de febrero de 2011

EL DESAFIO PERUANO

EL DESAFÍO PERUANO
Andrés Oppenheimer (EL PAÍS, 14 febrero 2011)
Durante una visita a Perú hace unos meses, varias personas me dijeron que el país estaba en buen camino y que -a diferencia de lo que ocurre en otros países- las próximas elecciones no serán ganadas por un candidato populista, sino por un político de centro-derecha. Al principio, tuve mis dudas, pero todo parece indicar que así será.
Esta semana, el presidente peruano, Alan García, dijo públicamente lo que yo había escuchado en conversaciones de sobremesa en Lima: que a diferencia de lo ocurrido en las últimas elecciones, cuando el candidato respaldado por Venezuela, Ollanta Humala, estuvo cerca de ganar la presidencia, esta vez no hay ningún candidato populista entre los favoritos para ganar las elecciones del 10 de abril.
"Se acabó el peligro", dijo García, refiriéndose a la posibilidad de que la apertura económica de Perú, que ya lleva 20 años, pudiera ser revertida. "Cualquiera de los que aparentemente tienen ventaja podrá y deberá mantener lo sustantivo del modelo exportador, descentralista, democrático y de inversión en nuestro país".
Todas las encuestas coinciden en que más del 80% de los peruanos apoyan un "modelo de desarrollo modernizador, democrático y globalizado", dijo García. En efecto, las últimas encuestas revelan que el expresidente Alejandro Toledo es el favorito, con alrededor del 30% de la intención de voto, seguido por Keiko Fujimori, la hija del expresidente Alberto Fujimori, y el exalcalde de Lima Luis Castañeda, con una intención del voto de alrededor del 20% cada uno. Los tres son políticos de centro-derecha. Humala ha quedado en un distante cuarto puesto en las encuestas, con alrededor del 11% de la intención del voto. Y lo que es más significativo aún, Humala ha tenido que suavizar considerablemente su discurso desde las últimas elecciones.
¿Por qué los peruanos respaldan a candidatos de centro-derecha? En gran medida se debe a 20 años de estabilidad económica y creciente inserción en la economía global que han dado resultados, sacando a un significativo número de peruanos de la pobreza.
Ahora hay una masa crítica de votantes de clase media que se han beneficiado de las dos décadas de apertura económica, y que apuestan a la continuidad. La economía de Perú creció un 8,8% en 2010, y tuvo una inflación inferior al 2%.
Según las estimaciones del Banco Mundial, los índices de pobreza de Perú han disminuido del 54% al 35% de la población en la última década. Y García pronosticó que el índice de pobreza disminuirá al 28% para fin de año.
La actual campaña presidencial en Perú no gira en torno a qué modelo económico debería adoptarse en el país, sino en torno a cómo perfeccionar el modelo actual. No resulta sorprendente que el eslogan de Toledo -que aparece en carteles por todo el país- sea: "Con Toledo, al Perú no lo para nadie".
Pero lo cierto es que Perú todavía no ha salido del pozo. Aunque los recientes presidentes del país merecen crédito por haber mantenido el rumbo y mejorado las cosas, una parte de la estabilidad económica y política del país fue cuestión de suerte. Económicamente, Perú se ha beneficiado del alto precio de las materias primas. Y políticamente, los candidatos de centro-derecha se han beneficiado de la popularidad de Keiko Fujimori en las zonas rurales, que le ha quitado votos a Humala.
Más importante aún, tal como me lo señaló el empresario y escritor Ben Schneider, Perú enfrenta una nueva amenaza: la complacencia. Muchos peruanos creen, equivocadamente, que el país puede seguir creciendo y reduciendo la pobreza sin nuevas reformas económicas y educativas, explicó.
Mi opinión: estoy de acuerdo. El crecimiento de Perú no será duradero si el país no toma medidas para mejorar sus niveles de educación, tecnología e infraestructura, para ser más competitivo a nivel mundial.
Según el Ranking de Competitividad Global publicado en enero por el Foro Económico Mundial, Perú ocupa el puesto 73 entre 139 países, más de 40 puestos por detrás de Chile. En el último examen PISA para medir la competencia de los estudiantes de 15 años en interpretación de textos, matemáticas y ciencias, Perú ocupó el puesto 63 entre 65 países. Entre los países latinoamericanos que participaron, Perú quedó último. En materia de patentes de invenciones, Perú registra apenas una patente por año en la Oficina de Marcas y Patentes de Estados Unidos. Corea del Sur, comparativamente, registra 8.800 patentes por año.
Perú merece crédito –como Chile, y más recientemente Brasil- por apostar a la estabilidad económica y a las inversiones. Pero para derrotar definitivamente la pobreza, quien gane las elecciones deberá vencer el síndrome de la complacencia, y mejorar estas cifras alarmantes.
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AMAR A QUIEN NOS HACE DAÑO

José Antonio PAGOLA

La llamada a amar es seductora. Seguramente, muchos escuchaban con agrado la invitación de Jesús a vivir en una actitud abierta de amistad y generosidad hacia todos. Lo que menos se podían esperar era oírle hablar de amor a los enemigos.

Sólo un loco les podía decir con aquella convicción algo tan absurdo e impensable: «Amad a vuestros enemigos, rezad por los que os persiguen, perdonad setenta veces siete... » ¿Sabe Jesús lo que está diciendo? ¿Es eso lo que quiere Dios?

Los oyentes le escuchaban escandalizados. ¿Se olvida Jesús de que su pueblo vive sometido a Roma? ¿Ha olvidado los estragos cometidos por sus legiones? ¿No conoce la explotación de los campesinos de Galilea, indefensos ante los abusos de los poderosos terratenientes? ¿Cómo puede hablar de perdón a los enemigos, si todo les está invitando al odio y la venganza?

Jesús no les habla arbitrariamente. Su invitación nace de su experiencia de Dios. El Padre de todos no es violento sino compasivo. No busca la venganza ni conoce el odio. Su amor es incondicional hacia todos: «El hace salir su sol sobre buenos y malos, manda la lluvia a justos e injustos». No discrimina a nadie. No ama sólo a quienes le son fieles. Su amor está abierto a todos.

Este Dios que no excluye a nadie de su amor nos ha de atraer a vivir como él. Esta es en síntesis la llamada de Jesús. "Pareceos a Dios. No seáis enemigos de nadie, ni siquiera de quienes son vuestros enemigos. Amadlos para que seáis dignos de vuestro Padre del cielo".

Jesús no está pensando en que los queramos con el afecto y el cariño que sentimos hacia nuestros seres más queridos. Amar al enemigo es, sencillamente, no vengarnos, no hacerle daño, no desearle el mal. Pensar, más bien, en lo que puede ser bueno para él. Tratarlo como quisiéramos que nos trataran a nosotros.

¿Es posible amar al enemigo? Jesús no está imponiendo una ley universal. Está invitando a sus seguidores a parecernos a Dios para ir haciendo desaparecer el odio y la enemistad entre sus hijos. Sólo quien vive tratando de identificarse con Jesús llega a amar a quienes le quieren mal.

Atraídos por él, aprendemos a no alimentar el odio contra nadie, a superar el resentimiento, a hacer el bien a todos. Jesús nos invita a «rezar por los que nos persiguen», seguramente, para ir transformando poco a poco nuestro corazón. Amar a quien nos hace daño no es fácil, pero es lo que mejor nos identifica con aquel que murió rezando por quienes lo estaban crucificando: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen". (Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia).

sábado, 5 de febrero de 2011

PRONUNCIAMIENTO DE LOS OBISPOS DE LA SELVA

Presidente de la Conferencia Episcopal y Obispos de la Selva expresan su preocupación por Decretos de Urgencia 001-2011 y 002-2011

Cuidar la casa de todos

Invocación del Presidente de la Conferencia Episcopal y de los Obispos de los Vicariatos Apostólicos de la Amazonía peruana

Hermanas y hermanos, como pastores de la Iglesia Católica, hacemos nuestra la gran preocupación suscitada por la reciente publicación de los Decretos de Urgencia N° 001–2011 y N° 002–2011, por parte del Poder Ejecutivo, en base a las facultades extraordinarias que le otorga la Constitución, a través de los cuales se dictan disposiciones especiales para facilitar la aplicación de 33 proyectos de inversión en nuestro país. Estos decretos de urgencia están destinados a exonerar del estudio de impacto ambiental a estos proyectos de inversión como requisito previo para la obtención de autorizaciones administrativas.


La Iglesia, como Madre y Maestra, jamás estará en contra de todo aquello que suponga sumar esfuerzos para alcanzar el bienestar de peruanos y peruanas. Es tarea nuestra -como nos lo han recordado nuestros hermanos del Episcopado Latinoamericano y Caribeño en Aparecida- cuidar la casa común, pues los recursos naturales se pueden agotar y corremos el riesgo de administrar miseria, llanto y desolación (Aparecida, 474).

La respuesta que damos se debe a la insistencia de numerosos fieles sobre la necesidad de los estudios de impacto ambiental, requisito fundamental para toda actividad extractiva y energética, a fin de conocer las graves consecuencias que un mal manejo ambiental podría tener para la población y nuestra diversidad de ecosistemas.

En los últimos años, como pastores hemos asistido a distintas solicitudes de mediación entre las comunidades y el Estado, a fin de evitar situaciones de violencia producto de la agudización de los conflictos sociales. En ellos, quien más pierde es el más pobre, cuya marginación es clamorosa.

Sabemos que desde el mes de diciembre pasado hay más de 200 conflictos sociales, la tercera parte de ellos vinculados al manejo del agua y recursos hídricos. Es preocupante que estos decretos puedan convertir la exigencia de los estudios de impacto ambiental en un requisito administrativo no obligatorio.

El agua, el aire, la tierra, son elementos esenciales de esa naturaleza gratuita que Dios nos ha otorgado generosamente. Los conflictos sociales se pueden prevenir y evitar si actuamos a tiempo. El desarrollo requiere el respeto a nuestra tierra y su gente (Cfr. Populorum Progessio, 20). Si queremos la paz, cuidemos la creación, nos dijo el Papa Benedicto XVI en su mensaje del 1 de enero de 2010. Estamos comprometidos en esa tarea.


Lima, 4 de febrero de 2011

(Firmas del Presidente de la Conferencia Episcopal y de los obispos de los vicariatos apostólicos de la Amazonía peruana presentes en el IV Encuentro de la Pastoral Indígena)

Monseñor Gerardo Zerdin O.F.M. Obispo del Vicariato Apostólico de San Ramón

Monseñor Francisco González O.P. Obispo del Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado

Monseñor José Luis Astigarraga C.P. Obispo del Vicariato Apostólico de Yurimaguas

Monseñor Santiago García de la Rasilla S.J. Obispo del Vicariato Apostólico de Jaén

Monseñor Gaetano Gambusera S.D.B Obispo del Vicariato Apostólico de Pucallpa

Monseñor Alberto Campos O.F.M Obispo del Vicariato Apostólico de San José del Amazonas

Monseñor Juan Tomas Oliver, OFM Obispo del Vicariato Apostólico de Requena

jueves, 27 de enero de 2011

PRONUNCIAMIENTO CONFERENCIA EPISCOPAL

Lima 26 de Enero del 2011
Conferencia Episcopal Peruana
AL SERVICIO DE LA DIGNIDAD HUMANA Y DEL BIEN COMÚN
Ante las próximas Elecciones Generales 2011, los Obispos del Perú, atentos a la voz de Jesucristo el Buen Pastor, que dice: “Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia” (Jn 10, 10), queremos ofrecer a todos los actores del proceso democrático -católicos y ciudadanos en general- algunas reflexiones que ayuden a ejercer el deber electoral con verdad y responsabilidad.

1. La dignidad de la persona es el centro de la preocupación social de la Iglesia. Ella enseña que, para discernir lo que es más justo y adecuado en orden al bien común, debe tenerse en cuenta la primacía del ser humano, la promoción de sus derechos fundamentales y la inclusión de los más débiles en los proyectos de desarrollo. La Iglesia considera el ejercicio de la política como un servicio a la nación. Es fundamental que se analicen las propuestas de los candidatos para garantizar estos principios.

2. El desarrollo social debe fundarse en el respeto y la promoción de los derechos humanos, el acceso a los servicios básicos de salud, nutrición, agua, educación, vivienda y seguridad ciudadana, especialmente de los más pobres. Las mejores condiciones económicas que el país experimenta deben llegar cuanto antes a los que todavía se encuentran en la pobreza o la marginación.

3. El ejercicio de la democracia debe respetar los principios éticos y morales vinculados a la promoción del bien común. Por ello, sin expresar preferencia por ninguna de las propuestas electorales, tenemos el deber de orientar a los fieles en aquellos planteamientos que, por sus implicaciones religiosas y morales, contradicen las enseñanzas de la Iglesia (cfr. Compendio de la Doctrina Social de Ia Iglesia, n.424).

4. Invitamos a estar alerta ante las propuestas que atentan contra la ley natural, el respeto a la dignidad humana, la verdad y la práctica de la justicia. Ir contra estos principios es desconocer nuestra realidad natural. Intentar cambiarlos traerá graves consecuencias para la sociedad, y los perjudicados siempre serán los más débiles. Por ello, el respeto y la defensa de la vida desde el primer instante de su concepción hasta su muerte natural es irrenunciable en todo planteamiento. No se pueden aceptar bajo ningún argumento el aborto, la eutanasia o la manipulación genética.

5. El matrimonio es la base de la familia y de la sociedad y tiene una importancia fundamental para el auténtico desarrollo. Por su origen divino, posee unas características propias e irrenunciables. “Creó, pues, Dios al ser humano a imagen suya, a imagen de Dios lo creó; varón y mujer los creó” (Gen 1,27). El matrimonio no es una unión cualquiera entre personas. Es la unión estable e indisoluble de un hombre y una mujer que se complementan y se entregan recíprocamente en una relación abierta a la vida. “Lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre” (Mt 19,6). También es reconocido así el matrimonio por las grandes culturas y por la Constitución Política del Perú. Ninguna otra realidad se le puede equiparar. Es responsabilidad de todas las instancias de la sociedad promover cuanto contribuya el bien del matrimonio y de la familia.

6. El vicio de la corrupción continúa socavando el desarrollo social y político de nuestro pueblo. Ha faltado la voluntad tenaz y el compromiso ejemplar de nuestras autoridades, la vigilancia y la colaboración eficaz de todos los ciudadanos y sobre todo, nos está faltando una fuerte conciencia ética y moral (cfr. Iglesia en América, 23). El proceso electoral es una ocasión propicia para exigir la presentación de programas que enfrenten con valentía las diversas formas de corrupción, tanto en los poderes del Estado como en los ámbitos de la actividad pública y privada.
7. Es preciso lograr un saludable equilibrio entre progreso económico y respeto a la naturaleza. Los planes de gobierno han de tener en cuenta la ecología y el uso racional de las riquezas de nuestro país, consultando oportunamente a los pueblos y a las comunidades en cuyo territorio se dan las concesiones de tierras y las licencias de explotación de los recursos naturales. Hay que prevenir así futuros conflictos y enfrentamientos que tanto dolor nos han causado y combatir abusos como el narcotráfico y la depredación de costa, sierra y selva.

8. Los candidatos deben tener en cuenta que la violencia social no se genera solamente porque exista pobreza, sino porque existe desigualdad. Un reto para las autoridades elegidas es lograr un mayor desarrollo, pero que se vea reflejado en la vida de todos los peruanos, principalmente de los más desfavorecidos. Por eso, las propuestas de gobierno deben expresar un compromiso real con los más necesitados y así mantener la esperanza de nuestros pueblos.

9. Es tiempo de un diálogo fecundo y alturado que genere espacios de armonía. La transparencia del proceso electoral exige que los electores sean escuchados por los candidatos y que entre estos haya un sereno intercambio de ideas. Así el elector podrá conocer no sólo los contenidos de los programas, sino también la preparación del candidato y la coherencia de su actitud. Por consideración al elector, se han de promover debates que le permitan formarse una opinión sólida y así poder ejercer libre y responsablemente su derecho a votar.

10. El ciudadano merece respeto e información veraz. Es indigno tratarlo como un objeto que se puede manipular o engañar. La dignidad del votante exige que resplandezca la verdad como elemento esencial para la paz, la convivencia, la democracia y la vida institucional . “La verdad los hará libres” (Jn 8,32)

11. Los periodistas y los medios de comunicación social han de participar con la máxima responsabilidad en el proceso. Los invitamos a ejercer la libertad de expresión buscando la verdad unida a la justicia y al bien común. Que su información sea objetiva, imparcial, abierta a todos los candidatos, a fin de que las propuestas sean conocidas de manera íntegra y veraz. Más allá de las lícitas actividades publicitarias de la campaña electoral y dejando de lado los cambiantes resultados de las encuestas, se debe privilegiar la correcta información para garantizar una verdadera participación ciudadana.

12. Los Obispos Latinoamericanos dijimos en Aparecida: “Urge crear estructuras que consoliden un orden social, económico y político en el que no haya inequidad y donde haya posibilidades para todos. Igualmente, se requieren nuevas estructuras que promuevan una auténtica convivencia humana, que impidan la prepotencia de algunos y faciliten el diálogo constructivo para los necesarios consensos sociales” (Documento de Aparecida, 384).
En esta etapa decisiva para el futuro del país, pidamos a Dios que nos ilumine para elegir a los más capaces y con mayor vocación de servicio; que a las autoridades les conceda la sabiduría necesaria para velar por el bien común; y que todos, solidariamente unidos, estemos dispuestos a trabajar por el Perú.
, pidamos a Dios que nos ilumine para elegir a los más capaces y con mayor vocación de servicio; que a las autoridades les conceda la sabiduría necesaria para velar por el bien común; y que todos, solidariamente unidos, estemos dispuestos a trabajar por el Perú.

LOS OBISPOS DEL PERU

sábado, 8 de enero de 2011

BAUTISMO DE JESUS Mt. 3,13-17

Bautismo del Señor (A) Mateo 3, 13-17
¿ESTAMOS APAGANDO EL ESPÍRITU?
José Antonio PAGOLA

Aunque el relato evangélico habla de la inmersión de Jesús en el Jordán, lo decisivo no es este bautismo de agua que recibe de manos del Bautista, sino la acogida del Espíritu que el Padre envía sobre él.

Según la mentalidad bíblica, este Espíritu hace vivir a Jesús desde el aliento vital de Dios, lleno de su amor y su fuerza creadora, entregado a liberar, transformar y potenciar la vida. Por eso, los primeros seguidores de Jesús lo recordaban como un Profeta que, "ungido por Dios con el Espíritu Santo..., pasó la vida haciendo el bien". Este es el Espíritu que ha de alentar a quienes siguen sus pasos.

La crisis religiosa de nuestros días se está extendiendo con tal radicalidad que la indiferencia está afectando ya a los mismos creyentes. Los indicios son cada vez más inquietantes. Hay analistas que denuncian el "ateísmo interior" que está diluyendo la fe de algunos que se dicen cristianos.

La Iglesia no es un "espacio inmunizado". Hay practicantes que de hecho no cuentan con Dios. Pueden pasar tranquilamente sin él. Dios no estimula su vida ni inspira su comportamiento. Viven una religión vacía de comunicación con Dios. En la práctica, Dios no existe para ellos. Sin advertirlo, se están instalando en la "cultura de la ausencia de Dios".

¿Vamos a permanecer pasivos ante esta extinción progresiva de la verdadera fe incluso dentro de nuestros hogares y comunidades? ¿No nos estamos haciendo cada vez más indiferentes a la indiferencia religiosa que parece invadirlo todo? ¿No ha llegado el momento de reaccionar?

Tal vez, lo primero es tomar conciencia de que somos nosotros mismos los que podemos estar apagando el Espíritu dentro de la Iglesia con nuestra ceguera y pasividad. Movidos por el instinto de conservación, corremos el riesgo de dedicarnos a conservar el pasado quizás porque nos resulta más cómodo que vivir en permanente conversión, abiertos a la creatividad del Espíritu.

Seguramente, hemos de cuidar más nuestro modo de relacionarnos con Dios, evitando formas superficiales y vacías, vividas sólo desde lo exterior, y que pueden ser formas de huir de su Misterio santo más que caminos para situarnos ante él en espíritu y en verdad.

Parece más necesario que nunca promover esa "participación plena, consciente y activa en las celebraciones litúrgicas", que el concilio Vaticano II urge "con deseo ardiente", pues considera que es "la fuente primaria y necesaria de donde han de beber los fieles el espíritu verdaderamente cristiano". Revitalizar la celebración es reavivar la fe. (Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia).